Técnica para entrenar la consciencia de uno mismo, el autoconocimiento,
el desarrollo habilidades emocionales individuales (como la expresión emocional
-escrita y verbal-, la comprensión de las emociones y su manejo, etc.) y de
convivencia en el aula (escucha, empatía, compasión, solidaridad, etc.).
INTENCIÓN
·
Abrir un espacio de comunicación personal para que nuestros pensamientos
y sentimientos fluyan y se expresen dentro de un marco saludable en lugar de
hacerlo de otras formas (hermetismos, explosiones, somatizaciones, depresión,
miedos, ansiedad, agresividad, intolerancia, etc.).
·
Aprender a compartir nuestros puntos de vista para comprendernos mejor
los unos a los otros.
PARTICIPANTES: Individual / Grupo de aula / Familia.
DURACIÓN: “El Diario Emocional” se puede trabajar
cada día en el aula (unos 5 mins.), en un espacio concreto de la semana
(tutoría) y/o cuando surja algún conflicto o desafío en el grupo.
MATERIALES NECESARIOS: Un cuaderno personal que nos guste.
DESCRIPCIÓN (Instrucciones):
1. Delimitar el tiempo fijo que le vamos a dedicar al “Diario emocional”
(crear hábito y rutina en el aula)
2. Cada alumno ha
decorado su cuaderno a su gusto. Es un diario personal e íntimo.
3. En su momento,
cada niño escribirá en su diario su experiencia emocional inmediata (algo de lo
que quiera escribir en ese momento, sobre lo que está viviendo, lo que le
preocupa, cómo se siente, lo que necesita cuidar y/o cambiar, etc.)
independientemente si es de signo positivo o negativo. También se pueden incluir
algunos dibujos.
4. Cada día
(sesión semanal o momento crítico en el aula), se pedirá a algunos alumnos que
lean en voz alta sus anotaciones (entre 3 – 5 alumnos). Todos escuchamos con
mucho respeto y atención.
5. Nadie juzgará o
recriminará las reflexiones de los niños que han leído.
6. Si es
necesario, podemos profundizar en alguna de las temáticas que han surgido en
los “Diarios emocionales” del grupo (sin entrar en valoraciones personales
sobre los niños que han leído).
7. Cerramos la sesión, felicitando a los niños por el buen trabajo que
están haciendo en sus diarios.
APUNTES (Información extra a tener en cuenta):
El mensaje fundamental que recibe el niño es: “MI PROFE Y MIS COMPAÑEROS ESTÁN AQUÍ PARA ESCUCHARME. Y YO, A ELLOS”.
Con esta práctica en el aula, se refuerzan:
·
La seguridad emocional y la autoestima del niño (al sentirse escuchado y
acompañado por los demás)
·
El autoconocimiento emocional (atención, comprensión y regulación de las
emociones)
·
La reducción de miedos y ansiedad
·
El vínculo afectivo y la cohesión interna de grupo
·
La comunicación de calidad y la escucha
·
La toma de decisiones en la solución de desafíos para el niño
·
La empatía, la compasión y la solidaridad
·
La solución dialogada de conflictos
·
Un seguimiento más profundo de cada alumno y su realidad emocional (por
parte del profesor)
¡Me gusta este diario! Creo que no debe faltar en nuestras aulas.
ResponderEliminarBuenos días, Sara: llevo haciendo el diario de emociones desde hace varios años y, siempre, resulta una actividad motivante, mágica y nutritiva para cualquier edad. Un saludo.
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